La alameda ubicada en la salida Sur de Etchojoa es un buen ejemplo de la importancia de reforestar Por Ramón García ramongb@hotmail.com Nacida hace 17 años a raíz de la muerte de un viejo árbol de álamo, que fue derribado por representar una amenaza para los automovilistas que transitan por la entonces recién ampliada carretera Etchojoa-Huatabampo, la alameda de la salida Sur de Etchojoa hoy es motivo de orgullo. A mediados del 2004, la indignación de varios etchojoense por que hubo necesidad de derribar un viejo álamo localizado a la orilla de la cinta asfáltica, llevó a las autoridades municipales del área de ecología de ese entonces a plantar nuevos árboles. Hoy, a casi 18 años de haber sido colocados - durante la administración de Gregorio Ontamucha Valenzuela-, los árboles debidamente alineados forman una gran alameda. Los viajeros suelen estacionan sus vehículos bajo las sombras de los grandes álamos; incluso las familias etchojoense suelen pasar las tardes